Esto dio pié a un cambio educativo, a un acceso global, a una alfabetización, a un derecho.
Hoy en día formamos parte de una revolución tecnológica y con ello se crea una nueva necesidad educativa. Como dice Ken Robinson, el sistema educativo es anacrónico. Ya no necesitamos memorizar datos que luego vamos a utilizar, tenemos wikipedia, google y un montón de soportes que nos permiten el acceso prácticamente en cualquier lugar.
Durante mi educación en los años 80-90 no había tiempo para crear procesos o desarrollar competencias y habilidades. Desde la educación de mis padres hasta la mía ha habido un cambio en el que se ha ido dando más importancia a los contenidos de las materias troncales como matemáticas y lengua y se ha ido dejando de lado las habilidades como coser o hablar en público. En un aula actual no hay tiempo de sacar a la pizarra a 30 alumnos de secundaria o hacer un trabajo grupal.
Todo esto se ve día a día en las aulas, en los niveles de fracaso escolar, en los menores diagnosticados con problemas de aprendizaje y en la falta de motivación.
El resultado es la sociedad
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