Es muy frecuente escuchar los mismos comentarios sobre un hijo, nieto, vecino o sobrino: es muy vago, está enmadrado, lo deja todo tirado por ahí, necesita ayuda para todo, no sabe hacer nada solo...
¿Estos niños son así?¿Qué se puede hacer para ayudarles y así ayudarnos a nosotros mismos?